top of page

¿QUÉ ES LA HIPNOSIS?

"La hipnosis es una intervención clínica valiosa en el tratamiento de una amplia variedad de problemas psicológicos y médicos, ayudando a la mejora de la calidad de vida de muchos pacientes (...) La eficacia de la hipnosis está bien establecida en diversas aplicaciones clínicas, especialmente el manejo del dolor y otras condiciones médicas, existiendo evidencia aceptable de su eficacia en el tratamiento de la depresión, los trastornos del sueño, dejar de fumar, la obesidad, el asma y la enuresis infantil"

(M. Elena Mendoza y Antonio Capafons, Universitat de València)

La Hipnosis Clínica o Hipnoterapia es una terapia complementaria tal como lo indica la "Orientación Técnica de Medicina complementaria y prácticas de bienestar de la salud en Atención Primaria" del MINSAL del año 2021. La Tesis de Grado de Mireia Perez Bennasara de la Universitat de les Illes Balears ahonda en cómo la Hipnosis junto a otras terapias complementarias tienen por objetivo ayudar a los tratamientos convencionales y mejorar la calidad de vida.

 

La Hipnoterapia, como la mayoría de las terapias complementarias, la puede estudiar quien tenga deseo de aprender para estudiarla, para sí mismo o para ayudar a los demás, en tópicos como:

Manejo del dolor: Una de las áreas de aplicación de la hipnosis que muestra una mayor evidencia empírica de su eficacia es el manejo del dolor, ya sea crónico o agudo (Lynn, Kirsch, Barabasz, Cardeña y Patterson, 2000; Montgomery, DuHammel y Redd, 2000, National Institute of Technology Assessment Panel Report, 1996, como el metaanálisis de Montgomery et al.,2000).
Ansiedad: Una investigación hecha por Schoenberger, Kirsch, Gearan,Montgomery y Parstynak (1997) indica que la hipnosis puede contribuir a la eficacia de la terapia cognitivo-comportamental para tratar la ansiedad. 
Obesidad: La hipnosis como coadyuvante a la terapia cognitivo-comportamental para el tratamiento de la obesidad (Schoenberger, 2000, basándose en los resultados del estudio de Bolocofsky et al., 1985).
Depresión: En un estudio de Alladin y Alibhai (2007) se presenta la primera comparación del tratamiento con hipnosis como coadyuvante de una terapia psicológica bien establecida para la depresión (Terapia Cognitiva de la Depresión de Beck) y esa misma terapia sin hipnosis. Si bien, tanto los pacientes tratados con hipnoterapia cognitiva (HC), como los tratados con terapia cognitivo-comportamental (TCC) mejoraron respecto a sus puntuaciones de línea base, los del grupo de HC mostraron cambios significativamente mayores en depresión, ansiedad y desesperanza que el grupo de TCC.
Tabaquismo: Según la revisión de Green y Lynn (2000), de acuerdo a los criterios de Chambless y Hollon (1998), la hipnosis se puede considerar como un tratamiento eficaz para dejar de fumar. La ventaja de su eficiencia radica en que es breve y económico, con menos costos que otras intervenciones, lo que se ve reflejado en su frecuente uso en la práctica clínica (i.e.: Elkins y Rajab, 2004; Elkins et al., 2006; Green, 1996; Lynn, Neufeld, Rhue, y Matorin, 1993; Mendoza, 2000).
Trauma: En un estudio realizado por Brom, Kleber y Defare (1989), se compararon los efectos de la hipnoterapia, la desensibilización sistemática y la psicoterapia psicodinámica en el tratamiento del estrés post-traumático. Las tres intervenciones mostraron ser más eficaces que el grupo control, tanto al final del tratamiento, como a los tres meses de seguimiento, si bien ninguna de las intervenciones fue superior a las demás. No obstante, el grupo de hipnosis necesitó menos sesiones de tratamiento que los otros grupos, siendo, junto con el de desensibilización sistemática, más eficaz que la terapia psicodinámica en el tratamiento de síntomas intrusivos.
Trastornos psicosomáticos: En una investigación reciente realizada por Flammer y Alladin, 2007, se analizaron sistemáticamente diversos estudios clínicos controlados y aleatorizados, y sobre ellos se realizó un meta-análisis para evaluar la eficacia de la hipnosis en el tratamiento de los trastornos psicosomáticos. Los autores concluyeron que según su metaanálisis, la hipnosis es altamente eficaz en el tratamiento de los trastornos psicosomáticos.
Trastornos Gastrointestinales: El síndrome de colon irritable es el trastorno funcional crónico más común en gastroenterología, caracterizado por dolor abdominal con diarrea y estreñimiento alternantes. Diversos estudios parecen mostrar que el tratamiento con hipnosis tiene un impacto importante y duradero en la mayoría de los pacientes con el síndrome de colon irritable, mejorando los síntomas intestinales, el bienestar psicológico y la calidad de vida, incluso de aquellos pacientes que no responden a los tratamientos médicos estándar (Gonsalkorale, Houghton, y Whorwell, 2002; Gonsalkorale y Whorwell, 2005; Whitehead, 2006; Whorwell, 2006).
Diabetes: Un estudio reciente (Xu y Cardeña, 2008) presenta una revisión de la literatura empírica sobre la eficacia de la hipnosis en el manejo de la diabetes y plantea el desarrollo de un protocolo multimodal con hipnosis para ayudar a los pacientes, tanto con los factores psicológicos como fisiológicos de este problema de salud.
Preparación a la cirugía: Según un estudio realizado por Pinnel y Covino, 2000, la hipnosis ha podido ser utilizada para reducir la cantidad de medicación pre y post cirugía para el dolor, el sangrado y el tiempo de hospitalización, así como para facilitar el post-operatorio y la recuperación.
Oncología: La hipnosis ha mostrado ser efectiva en su aplicación a pacientes de cáncer en la ayuda del manejo del dolor, la reducción de la ansiedad relacionada con los procedimientos médicos y la reducción de la emesis e hiperémesis posterior a la quimioterapia (Pinnel y Covino, 2000; Néron y Stephenson, 2007).
Obstetricia:  Según una revisión realizada por Pinnel y Covino, (2000), en el ámbito de la obstetricia la hipnosis ha demostrado ser una terapia facilitadora en el parto, resaltándose que las pacientes que utilizaron hipnosis tuvieron una mayor satisfacción con la experiencia de dar a luz (Freeman, MacCauley, Eve y Chamberlain, 1986), un parto más corto (Brann y Guzvica, 1987; Jenkins y Pritchard, 1993), y un menor uso de medicación y analgésicos durante el parto (Jenkins y Pritchard, 1993).
Trastornos dermatológicos: Existen diversos estudios sobre intervenciones hipnóticas que han tratado con éxito diversas condiciones dermatológicas como eczema, ictiosis, verrugas y psoriasis (Ewin, 1992; Zachariae, Øster, Bjerring y Kragballe, 1996).
Asma: Asociación de Tuberculosis Británica (Research Committee of the British Tuberculosis Society, 1968). comparó la eficacia de la hipnosis y la relajación muscular progresiva en el tratamiento de 252 pacientes con asma. Los pacientes del grupo de hipnosis informaron que sentían significativamente menos resuellos sibilantes, y que usaban menos medicación al finalizar el tratamiento.
Inmunología: Estudios han informado de la capacidad de la hipnosis para aumentar el funcionamiento inmune (Bakke, Purtzer y Newton, 2002; Kiecolt-Glaser, Marucha, Atkinson y Glaser, 2001; Wood et al., 2003).
Hipertensión: La hipnosis como coadyuvante a la terapia cognitivo-comportamental se ha utilizado para el tratamiento de la hipertensión (Lynn et al., 2000). En un estudio piloto, Raskin, Raps, Luskin, Carlson y Cristal (1999), compararon tres grupos de pacientes hospitalizados, uno aprendió auto-hipnosis, otro recibió la misma atención y tiempo pero sin un procedimiento específico de relajación, y un tercer grupo fue evaluado sin ser intervenido. En el seguimiento se observó que los pacientes del grupo de autohipnosis mostraron el mayor descenso en la presión diastólica.
Odontología: La hipnosis tiene diversas aplicaciones en odontología. En una revisión de la literatura, Chaves (1997) indicó que además de ayudar a los pacientes a afrontar los procedimientos dentales estresantes y reducir la ansiedad fóbica a las inyecciones y otras intervenciones dentales, la hipnosis puede ser importante en las siguientes áreas de la práctica odontológica: mejora de la tolerancia de las prótesis ortodónticas o prostéticas; modificación de los hábitos orales no adaptativos; reducción del uso de la medicación anestésica, analgésica y sedante; complementación o sustitución de la medicación previa a la cirugía; control de la salivación y el sangrado; intervención terapéutica en síndromes de dolor facial crónico (por ejemplo, los trastornos temporo-mandibulares); como complemento al uso del óxido nitroso; y aumento de la adherencia a las recomendaciones de higiene personal (Chaves, 1997).

Fuente: M. Elena Mendoza y Antonio Capafons Universitat de València

El Dr. David Spiegel, MD es Presidente Asociado de Psiquiatría y Ciencias del Comportamiento, Director del Centro de Estrés y Salud y Director del Centro de Medicina Integrativa de la Facultad de Medicina de la Universidad de Stanford. Su experiencia clínica y de investigación se centra en la hipnosis, la fisiología del estrés y la psicoterapia. 

NUEVOS ESTUDIOS Y METAANALISIS (METAESTUDIOS) de 2014 a 2023 que han encontrado que la hipnosis es un tratamiento para una variedad de condiciones.

 

Estos estudios proporcionan evidencia adicional de que la hipnosis es un tratamiento seguro y eficaz para una
variedad de condiciones. La hipnosis se puede utilizar para mejorar la calidad de
vida al reducir los síntomas de ansiedad, dolor, insomnio, síndrome del intestino irritable, anorexia
nerviosa, tricotilomanía y obesidad entre otros.

bottom of page